BERLUSCONI BAJO LA LUPA CRÍTICA DE UN CINEASTA ARGENTINO

El ácido filme de Rubén Oliva compara al premier italiano con Menem y es un suceso.

Los misterios del origen de su riqueza, sus relaciones con la mafia, su irrupción en la vida política italiana, europea y mundial; su fabulosa fortuna, sus paralelos impresionantes con el ex presidente argentino Carlos Menem. Durante 90 minutos, la película dirigida por el director y periodista argentino Rubén Oliva, tiene un protagonista indiscutido: Silvio Berlusconi, el premier italiano, el propietario de las tres grandes cadenas de TV y otros negocios, quien ha rechazado siempre distinguir el conflicto de intereses entre sus actividades privadas y su condición de hombre público.

Cuando estaba Silvio es el título del filme que también se llama Una historia del período berlusconiano. Según contó Oliva a Clarín, la obra llena las salas independientes donde se proyecta y en DVD se han vendido más de 200 mil copias. "La película es un docufilme que une géneros distintos: de la ficción al reportaje, del arte gráfico al repertorio inédito. Hasta aparecen Pinocho, Carlos Marx y Mussolini", dijo el director, que fue en Italia periodista de Il Giorno, La Repubblica y la RAI.

"Volví a la Argentina entre 1988 y 1999, donde hice televisión, fui corresponsal de la prensa italiana y trabajé en documentales. Tengo grabado lo que fue el menemismo. En la época de Menem se cambió cultural y sociológicamente a nuestro país. Con Berlusconi se exaltó en el hombre medio lo chanta y la falta de límites morales. Creo que entre Menem y Berlusconi hay paralelos extraordinarios: ambos se tiñen el pelo, son petisos y usan zapatos de taco alto; se han hecho la cirugía estética para lucir jóvenes, tienen un estilo populista. Y ambos hundieron a sus países".

Oliva destacó algunos momento del filme que han causado mucho impacto en la opinión pública, sensibilizada por una campaña electoral exasperada para las elecciones del 9 de abril, que Berlusconi puede perder.

"Contamos las características increíbles del mausoleo que se construyó en su lujosa villa de Arcore, cerca de Milán. De la visita de Mijail Gorbachov, que no quiso entrar cuando Berlusconi quería mostrarle las tumbas y nichos que esperaban a sus ’huéspedes’, entre ellos al mismo Berlusconi", dijo Oliva.

Cuando estaba Silvio contiene una entrevista al fiscal de Palermo Antonio Ingroia, que narra todo lo que está probado en el proceso a Marcello Dell’Utri, uno de los más íntimos colaboradores de Berlusconi. Dell’Utri ha sido condenado en Palermo a 9 años de prisión por asociación externa con la mafia, aunque sigue libre porque el juicio está en apelación. "Dell’Utri, siciliano, ha sido durante 30 años el embajador de la mafia en el norte de Italia. El es quién hoy elige a los candidatos del partido de Berlusconi, Forza Italia. Es parlamentario y será presentado para una reelección segura en los comicios. En la película, el fiscal Ingroia cuenta como Berlusconi se negó a responder a las preguntas de los magistrados de Palermo que trataron de interrogarlo en Roma".

Según Oliva, la historia de los misterios de la fortuna de Berlusconi tiene que ver con su relación con Dell’Utri y con el dinero de la Cosa Nostra, que respaldaron su aventura empresaria.
                               

                                                                                                     inf. Clarín